Miles de personas estuvieron presente en la Cruz Azul, al pie de la colina de las Apariciones, para el mensaje mensual a la vidente Mirjana Soldo. Después de la aparición, Mirjana transmitió el siguiente mensaje de la Santísima Virgen:
Queridos hijos, estoy viniendo, con mi amor maternal, para indicar el camino por el que han de transitar, para que puedan ser lo más semejantes a mi Hijo, y así, estar más cerca de Dios y agradarle más. No rechacen mi amor. No renuncien a la salvación y a la vida eterna por ir tras lo fugaz y la frivolidad de la vida.
Mirjana dijo que la Santísima Virgen apareció con el sol brillante detrás de Ella durante todo el tiempo de la aparición. Al mismo tiempo, miles de asistentes a la aparición pudieron ver el llamado milagro del sol, sin daño alguno.
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Celebración del 5 de agosto de 2009¡Honremos a María en su día!
Miércoles 5 de agosto, San Ignacio de Loyola, Alsina y Bolívar,
18 hs Rezo del Santo Rosario y Adoración,
19 hs Misa Solemne: Nuestra Señora de las Nieves, Patrona 2da. de la Ciudad de Buenos Aires. Rezaremos por salud para nuestras familias, Consagración de nuestras familias y nuestra ciudad a la Santísima Virgen. Entrega de la Rosa Blanca bendecida para llevar a la Sma.Virgen en nuestros hogares.
En www.mensajerosdelareinadelapaz.org/actividades.htm ver información sobre la Celebración del 5 de agosto y el Cumpleaños de la Santísima Virgen María!
¡Bendito, Alabado y Adorado sea Jesucristo en el Santísimo Sacramento del altar!
Mensaje de María Reina de la Paz en Medjugorje del 25 de julio de 2009
¡Queridos hijos! Que este tiempo sea para ustedes un tiempo de oración. ¡Gracias por haber respondido a mi llamado!
Comentario
Ciertamente, la continua e insistente exhortación a la oración es para que entendamos que ésta es prioritaria. Y este reiterado pedido, que nos debe llevar a vivir la oración como esencial, como lo urgente por hacer, como aquello que no podemos hacer a menos porque es el respiro del alma y porque nada la puede sustituir, es lo que no solemos oír. Por lo contrario, por todas partes se oyen discursos en los que se nos habla de aumentar el compromiso social y en combatir la crisis y el mal con la acción y argumentos por el estilo. En ninguna parte, excepto, claro está en las exhortaciones del Santo Padre y del Magisterio, se menciona la necesidad vital de volver la mirada a Dios y recurrir y dialogar con Él. De ir a la oración, ese coloquio secreto entre Dios y el alma.
Cuando se dice primacía de la oración, nunca debe entenderse primacía como exclusión: la oración sí y la acción no. Oponer la acción a la oración es una artimaña del demonio. Lo que simplemente se significa es que la oración antecede, en cuanto nutre e impulsa a la acción humana confiriéndole la fuerza y la bendición divinas.
En el mensaje, aunque tan breve, hay algo más que merece ser comentado y esto es la mención de “este tiempo”. “Este tiempo” puede ser entendido de varias maneras. Así, puede referirse a este tiempo en el que estamos inmersos y en el que parece no haber contención para el mal. Tiempo terriblemente difícil para educar en las virtudes y para vivir sin ser tocado por la contaminación exterior que busca negar a Dios y corromper al alma. Pero, también “este tiempo” puede significar el tiempo de gracia que nos regala el cielo, el tiempo de la misericordia de Dios que se manifiesta por estas apariciones de la Santísima Virgen que nos reasegura con su presencia maternal. Sin duda alguna, éste es el tiempo en que el Señor nos viene preservando de la autodestrucción y que nos envía a su Madre para que nos guíe e ilumine el camino en medio de las tinieblas del mundo.
“Este tiempo” tiene también una resonancia peculiar para cada uno de nosotros. Es el tiempo de nuestra vida hoy. Es el de nuestra circunstancia y estado de gracia. Y, entonces, escuchar además de la necesidad de la oración, que la Santísima Virgen nos hable de “este tiempo”, tiene el efecto de interpelarnos para recapacitar sobre el sentido que le damos a esta vida, lo efímera que es, y a aprovechar la gracia –mediante la oración- para profundizar la conversión a Dios.
Finalmente, “este tiempo”, hace referencia al tiempo de ocio que deriva de las vacaciones estivales en el hemisferio norte.
En cualquier caso, nuestra Madre quiere que despertemos al hoy de nuestra vida para vivirlo en la intensidad de la conciencia que de Dios venimos, por Él existimos, en Él nos movemos y a Él iremos. Por tanto, no se puede seguir ignorando la verdad de nuestra condición de creaturas y nuestra necesidad de ser salvadas por Dios.
No se puede no aprovechar el tiempo, este tiempo, para encontrarnos con nuestro Creador y Salvador por medio de la oración. Esto es lo primordial, el resto vendrá por añadidura.
Sí, el tiempo que nos toca vivir es terrible, por eso la Virgen Santísima en este mensaje nos está diciendo: “vayan a lo esencial, no pierdan más tiempo y oren, oren, oren”. Una hermana recordaba que en la época de la guerra en los Balcanes la Virgen había dado un mensaje similar. Simplemente decía: “Oren, oren, oren”. Sí, este es tiempo de gracia, gracia que Dios nos ofrece, cuando las oraciones más fácilmente se abren camino hacia el cielo porque los corazones, siempre por la gracia de Dios, se abren a su conversión. Y se abren por medio de la oración.
Para aquellos que están ya de vacaciones o por empezarlas, el mensaje advierte que éste es tiempo para no distraerse con las cosas del mundo y mucho menos perderse en ellas. Es el tiempo para aprovechar aún más del ocio intensificando el tiempo y la profundización de la oración.
En todos los casos, aprovechemos nuestro tiempo uniéndonos a Dios en oración.
P. Justo Antonio Lofeudowww.mensajerosdelareinadelapaz.org