sábado, 31 de octubre de 2009

Concédenos, Señor, Dios nuestro, amarte con todo el corazón y, con el mismo amor, amar a nuestros prójimos. Por nuestro Señor Jesucristo...


JMS Evangelio del dia 31 de Octubre y Meditacion

Evangelio
Un sábado entró Jesús en casa de uno de los jefes de los fariseos para comer, y ellos estaban espiándolo. Mirando que los convidados escogían los primeros lugares, les dijo esta parábola:
"Cuando te inviten a un banquete de bodas, no te sientes en el lugar principal, no sea que haya otro invitado más importante que tú; y el que los invitó a los dos venga a decirte: "Déjale el lugar a éste", y entonces tengas que ir todo avergonzado a ocupar el último asiento.
Por el contrario, cuando te inviten, siéntate en el último puesto; así, cuando venga el que te invitó, te diga: "Amigo, acércate a la cabecera".
Entonces te verás honrado ante todos los convidados.
Porque todo el que se engrandece será humillado, y el que se humilla será engrandecido".
Palabra del Señor.

Lucas 14, 1. 7-11

Sálvanos, Señor y Dios nuestro; reúnenos de entre las naciones, para que podamos agradecer tu poder santo y sea nuestra gloria alabarte.

Jesús fue invitado a un banquete. En la mesa, como también ocurre frecuentemente en nuestros días, había lugares de mayor honor. Los invitados, quizá un tanto atropelladamente, se dirigían a estos puestos más considerados. Jesús lo observaba. Quizá cuando ya estaba terminando la comida, en los momentos en los que la conversación se hace más reposada, el Señor les dice: Cuando seas invitado a una boda, no te sientes en el primer puesto... Al contrario..., ve a sentarte en el último lugar, para que cuando llegue el que te invitó te diga: amigo, sube más arriba. Entonces quedarás muy honrado ante todos los comensales. Porque todo el que se ensalza será humillado; y el que se humilla será ensalzado.

Jesús se situaría probablemente en un lugar discreto o donde le indicó el que le había invitado. Él sabe estar, y a la vez se da cuenta de aquella actitud poco elegante, también desde el punto de vista humano, que adoptan los comensales. Estos, por otra parte, se equivocaron radicalmente porque no supieron darse cuenta de que el mejor puesto se encuentra siempre al lado de Jesús. Por llegar hasta allí, junto al Señor, es por lo que debieron porfiar. En la vida de los hombres se observa no pocas veces una actitud parecida a la de aquellos comensales: ¡cuánto esfuerzo para ser considerados y admirados, y qué poco para estar cerca de Dios! Nosotros pedimos hoy a Santa María, en este rato de oración y a lo largo del día, que nos enseñe a ser humildes, que es el único modo de crecer en amor a su Hijo, de estar cerca de Él. La humildad conquista el Corazón de Dios. ““Quia respexit humilitatem ancillae suae”
—porque vio la bajeza de su esclava...

“—¡Cada día me persuado más de que la humildad auténtica es la base sobrenatural de todas las virtudes!

“Habla con Nuestra Señora, para que Ella nos adiestre a caminar por esa senda”

Refleccionemos

La Humildad no es el fuerte de nosotros los seres humanos, sin embargo Jesús nos hace saber que es esncial, y que aún la virtud y la sabiduria si no nos llevan a la humildad en el fondo nos hacen mal. Al contrario, nuestras faltas pueden hacernos bien si producen humildad. Es tan poderosa la humildad que hace bueno lo malo, y malo lo bueno, es decir, que todo lo que no nos hace humildes nos hace mal, nos convierte en fariceos.

Propósito

Hoy aprenderé de memoria los cinco misterios dolorosos meditandolos serenamente, en este mes del Santo Rosario


MARTES Y VIERNES


[Jesús ora en el huerto]
Lc. 22, 41-44
1º. JESÚS ORA EN EL HUERTO

«Jesús, puesto de rodillas, oraba diciendo: Padre, si quieres, aparta de mí este cáliz; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya. Y entrando en agonía oraba con más intensidad. Y le vino un sudor como de gotas de sangre que caían hasta el suelo».

[Jesús es flagelado]
Jn. 18, 38 - 19, 1
2º. JESÚS ES FLAGELADO

«Pilato se dirigió de nuevo a los judíos y les dijo: Yo no encuentro en El ninguna culpa. Hay entre vosotros la costumbre de que os suelte uno por la Pascua, ¿queréis, pues, que os suelte al Rey de los judíos? Entonces gritaron de nuevo: A Este no, a Barrabás. Barrabás era un ladrón. Entonces Pilato tomó a Jesús y mandó que lo azotaran».

[Jesús es coronado de espinas]
Mt. 27, 27-29
3º. JESÚS CORONADO DE ESPINAS

«Los soldados del procurador llevaron a Jesús al pretorio y reunieron en torno a El a toda la cohorte. Le desnudaron, le pusieron una túnica roja y trenzaron una corona de espinas, se la pusieron en la cabeza, y en su mano derecha una caña; se arrodillaban ante El y se burlaban diciendo: Salve, Rey de los judíos».

[Jesús con la cruz a cuestas]
Jn. 19, 15-18
4º. JESÚS CON LA CRUZ A CUESTAS

«Pilato entonces se lo entregó, para que fuera crucificado. Tomaron, pues, a Jesús, y El con la cruz a cuestas salió hacia el lugar llamado de la Calavera, en hebreo Gólgota».

[Jesús muere en la cruz]
Jn. 19, 18; 25-27, 30
5º. JESÚS MUERE EN LA CRUZ

«Le crucificaron, y con Él a otros dos, uno a cada lado y en el centro Jesús. Estaban junto a la cruz de Jesús su madre y la hermana de su madre, María de Cleofás, y María Magdalena; Jesús, viendo a su Madre, dijo: Mujer, he ahí a tu hijo. Después dice al discípulo: He ahí a tu madre. E inclinando la cabeza entregó el espíritu».




Hoy Sabado corresponde Rezar despues de la meditacion
Los Misterios de GloriaAqui los encontraras

martes, 27 de octubre de 2009

Una sola cosa he pedido al Señor y es lo único que busco: habitar en su casa todos los días de mi vida.


JMS Milagro Eucarístico en el mundo Jesús se manifiesta para que aquellos que en El no crean se conviertan Rezen, Pidan perdon y agradescan a Dios por esta vida.

Aquí ver milagros Eucarísticos en el mundo

Milagro Eucarístico en la Ciudad de Buenos Aires

Sabemos que en el mundo han ocurrido diversos casos de milagros Eucarísticos a través de los siglos, donde la Eucaristía se ha convertido en Carne o cubierto de Sangre, de modo espontáneo (Vea milagro de Lanciano HACIENDO CLICK AQUI). Hoy recogimos este testimonio de un hecho ocurrido en la Ciudad de Buenos Aires hace poco tiempo. Un lector de Reina del Cielo acudió a la Parroquia Santa María, donde ocurrió este prodigio, y recibió este folleto explicativo de lo que allí aconteció.

Texto del material entregado en la Parroquia:

“Mi Carne es la verdadera Comida y mi Sangre es la verdadera Bebida”
Parroquia Santa María – Av. La Plata 286 – Ciudad de Buenos Aires.

Después de haber dialogado y rezado juntos en torno al signo, queremos entregarte una breve narración de los hechos que hemos compartido para que los recuerdes y los sigas meditando.

¿Cómo fueron los hechos?

Mayo 1992

Después de la Misa del viernes 1 de mayo, al hacer la reserva del Santísimo Sacramento, el ministro de la Eucaristía encontró dos trozos de Hostia sobre el corporal del Sagrario. Consultado el sacerdote, le indicó que los colocara en un recipiente con agua en el Sagrario (una de las formas habituales para esperar que se disuelvan y luego poder purificar). En los días siguientes, algunos sacerdotes miraban para ver si ya se habían disuelto, sin observar cambios. Siete días más tarde, el viernes 8 de mayo, encontraron que las formas tenían un color rojizo, con apariencia de sangre. El domingo siguiente, 10 de mayo, durante las dos Misas vespertinas, se observaron unas gotitas de sangre en las patenas con las que los sacerdotes distribuían la Comunión.

Julio 1994

El domingo 24, durante la Misa con niños, cuando el ministro de la Eucaristía retiraba el copón del Sagrario, al destaparlo, vio una gota de sangre que corría por la pared interna del mismo.

Agosto 1996

En la Misa de las Fiestas Patronales de la Asunción de la Santísima Virgen, nuevamente se tuvo que poner una Hostia en un recipiente con agua para su disolución. Unos días más tarde, el 26, una ministro de Eucaristía, al hacer la reserva del Santísimo Sacramento, encontró que la forma se había vuelto carne.

¿Cómo se procedió?

En cada uno de los acontecimientos se informó de inmediato al Arzobispo, quien indicó que se guardara la conveniente reserva y que todos los recipientes se colocaran en un lugar adecuado. También se pidió que se hicieran los estudios científicos correspondientes y que se escuchara con atención “qué dice la comunidad”. La documentación y el resultado fueron enviados a Roma. Se autorizó a que la comunidad reciba a quienes se presenten espontáneamente para enterarse de lo sucedido. Por eso, hemos abierto un espacio mensual, para relatar los hechos y rezar juntos.

¿Qué dice la comunidad?

A lo largo de estos años, en nuestra comunidad parroquial, con respeto y silencio, hemos compartido y rezado juntos. Sin duda, estos hechos no nos pertenecen. Son de todos. Queremos contarte lo que hemos reflexionado hasta el momento. El Signo nos ha despertado a la búsqueda de mayor hondura en las celebraciones eucarísticas y a profundizar la adoración del Santísimo Sacramento. Tanto en pequeños grupos como en las Asambleas Parroquiales, intentamos centrar nuestra vida personal y comunitaria en la Eucaristía. Entendemos estos hechos como signos del Amor de Dios, vivo y presente entre nosotros, memoria de la Pasión de Cristo, que nos abre a la esperanza.

En un clima de discernimiento, nos seguimos preguntando cuáles son los caminos a seguir. Rezamos para que en todas las comunidades eclesiales crezca el sentido eucarístico de nuestra fe y te pedimos que reces también en tu comunidad, para que sigamos avanzando en este camino de discernimiento. Creemos que al transmitir y recibir estos hechos, debemos hacerlo respetando la libertad de la fe. Nadie puede obligar a otro a considerarlos de ésta o aquella manera. Por otro lado, cada uno tiene la obligación en la fe de acoger lo que en la oración Dios le inspire, y, la actitud fraterna de transmitirlo con libertad.

¿Qué celebrábamos esos días?

Desde un comienzo, nos llamó la atención…La multiplicación de los panes y el discurso del Pan de vida de San Juan (Jn. 6) fueron las lecturas del 1 al 8 de mayo de 1992 (segundo al tercer viernes del tiempo Pascual) y también del domingo 24 de julio de 1994 (domingo 17 durante el año del ciclo B). La fiesta del Buen Pastor la celebramos aquel domingo 10 de mayo de 1992. Y en el año 1996, en la Arquidiócesis, rezamos la semana por las vocaciones, (con lecturas acerca del Buen Pastor), mientras transcurrían los hechos narrados. Somos invitados a contemplar al Señor como nuestro Buen Pastor que nos alimenta con su Cuerpo y con su Sangre.

La Virgen María tiene un protagonismo especial. El 8 de mayo es la fiesta de Nuestra Señora de Luján, Madre de nuestra Patria. En el año 1996, los hechos coincidían con nuestras fiestas patronales de la Asunción de María Santísima. Estas circunstancias, sumado al hecho de que la Parroquia está dedicada a Santa María, nos ha hecho dirigir nuestra atención al vínculo íntimo entre María y la Eucaristía. Nos sentimos invitados a descubrir a María como Madre de la Eucaristía. Santa María, Vos diste tu carne y tu sangre para que Jesús fuera nuestro hermano. Vos cuidaste y alimentaste su cuerpo y estuviste de pie junto a la cruz, recibiéndolo como ofrenda para nuestra Salvación.
Vos estás siempre presente cada vez que los discípulos de Jesús se reúnen a partir su Pan y a beber de su Cáliz. Llévanos hacia la Adoración Eucarística y a cuidar de Él como Vos lo hiciste. Enséñanos a ofrecer nuestra vida en cada Eucaristía para que el Espíritu de Vida sea derramado en todos los hombres y conozcamos el Amor del Padre formando un solo Cuerpo.
María, Madre de la Eucaristía…
Ruega por nosotros.

Recibimos fraternalmente a todos los que quieran venir a escuchar el relato detallado de los hechos acontecidos en nuestra Parroquia. También, será la ocasión para dialogar en la fe sobre la Eucaristía, enriqueciéndonos mutuamente. Terminamos nuestros encuentros con un momento de adoración al Santísimo.

Cuartos sábados de cada mes 11 horas.
Adoramos a Jesús Eucaristía, en nuestro templo parroquial, todos los jueves de 8 a 21 horas y los primeros viernes de mes de 17 a 20,30 hs.


Carta de un lector de Reina del Cielo:

El 7 de mayo de 2007 recibimos un correo de un feligrés de la Iglesia de Santa María, que nos informa de lo siguiente:

Soy un feligrés de la Parroquia Santa María y lector de Reina del Cielo. Los felicito por la sobriedad con que han hecho público que en mi Parroquia se relatan hechos extraordinarios ocurridos entre los años 1992 y 1996. Lo que quiero aclarar es que el folleto debe tener cierta antigüedad pues actualmente en Santa María hay Adoración Eucarística todos los días, en la Capilla inaugurada en el mes de agosto a la que se puede acceder desde el Templo. Comienza después de la Misa de 8 horas y culmina con la reserva del Santísimo a las 21hs. Es un esfuerzo de la comunidad, porque siempre hay algún adorador acompañando al Señor Los primeros viernes de cada mes, al concluir la Misa de las 19hs., se hace un rato de Adoración en el Templo, culminando con la Bendición con el Santísimo Sacramento. Por otro lado, el relato de los hechos extraordinarios no solo se hace el 4ª sábado de cada mes en la Parroquia a las 11 hs, sino que se ha agregado el 3º viernes del mes a las 20hs. Les agradecería que actualizaran esta información en su página, por si a alguien le interesa.

Gracias, que Dios los bendiga y sigan adelante.

Cronica detallada de como fueron los acontecimientos

Articulo del DOCTOR RICARDO CASTAÑON GOMEZ ha escrito El 23 de diciembre de 2008


El 15 de agosto del año 1996 una persona comulga en la parroquia de Santa Maria en Buenos Aires y la hostia se le cae de la mano al comulgar; como considera que esta hostia está sucia no la quiere levantar entonces otra persona más piadosa la pone a un lado y le avisa al párroco el P. Alejandro Pese lo ocurrido.

El sacerdote coloca la hostia en un deposito de agua y la pone en el tabernáculo porque es norma que si una hostia consagrada tiene algún incidente debe ponérsela en agua para que se disuelva y luego echar el agua en una planta.

Cuando a los once días el sacerdote va a buscar que es lo que ha pasado, se encuentra que la hostia tiene unas manchas rojizas y en los siguientes días se extiende este color rojizo por toda la hostia. Los sacerdotes de esta parroquia acuden al arzobispo de Buenos Aires para contarle lo sucedido y el arzobispo de ese entonces pide por favor esperar tiempos mejores ya que es un tema muy delicado.

El año 1999 siendo ya arzobispo el Cardenal Jorge Bergoglio y enterado que yo hago estas investigaciones de manera gratuita me escribe una carta invitándome a ocuparme de esta investigación.

Viaje el 6 de octubre a Buenos Aires y entrevisté a cinco sacerdotes testigos de todo lo ocurrido, ya en ese año son dos hostias las que habían sangrando, tomo las muestras de ambas hostias; durante la extracción de muestras se encuentra presente el notario del arzobispado que certifica legalmente esta acción solicitada por autoridades de la Iglesia en Argentina.

Debo aclarar que cuando me invitaron, el arzobispado de Buenos Aires se comunico con la Santa Sede propiamente con Mons. Gianfranco Girotti que era el secretario privado del Cardenal Ratzinger en la oficina de la Congregación para la Doctrina y la Fe y fue Mons. Girotti quien les dio referencias de mi persona para llevar adelante esta investigación.

El 21 de octubre de 1999 viajo al Forence Analitycal de San Francisco un laboratorio de genética que puede hacer el análisis de las muestras que he tomado.

El 28 de enero del 2000 encuentran ADN humano en las muestras, se trata de sangre humana que tiene un código genético humano.

En marzo del 2000 me comunican que desean que participe de este análisis el Dr. Robert Lawrence médico forense histopatólogo experto en tejidos.

A mi me dio temor la participación del Dr. Lawrence por el costo que podría implicar y me comentaron que deseaban su participación porque en la muestra encontraron unas sustancias que parecen tejidos humanos, entonces el Dr. Lawrence estudia la muestra y encuentra piel humana y glóbulos blancos.

En diciembre del 2000 el Dr. Lawrence me comenta que puede obtener más muestras de ADN, pero como me dicen que se trata de piel humana viajo a Italia porque deseo hablar con el Dr. Oduardo Ardonidoli que ha estudiado la hostia de Lanciano; una hostia que sangró en el siglo VIII, el Dr. Ardonidoli estudio a pedido de la Conferencia Episcopal Italiana esta ostia. Yo consulté mis muestras ante Ardonidoli y él me dice: “probablemente esto es tejido de corazón, no es epidermis, o sea no es piel humana”

Como yo no puedo trabajar con probabilidades mandamos la muestra al profesor Jhon Walker de la Universidad de Sydney en Australia y me informa que las muestras enviadas son células musculares y también encuentra glóbulos blancos intactos.

Las investigaciones muestran que estos tejidos están inflamados por lo tanto esta persona ha tenido un sufrimiento.

El 2003 este mismo profesor me dice que estas muestras pueden corresponder a tejido de corazón inflamado, este investigador me dice “puede corresponder”

Para salir de dudas nos vamos donde el mayor experto en patologías del corazón, Profesor Federico Stigibe de la Columbia University en Nueva York

Su informe es enviado el 26 de marzo del 2005 cinco años y medio desde el inicio de la investigación: “se trata de tejido de corazón tiene cambios degenerativos del miocardio y estos cambios degenerativos se deben a que las células están inflamadas y se trata del ventrículo izquierdo del corazón”

Las muestras que poseo son de músculo del corazón; quiero decir que el resultado de esta muestra es carne y sangre, el músculo es del miocardio el centro que hace latir el corazón del ventrículo izquierdo donde esta la sangre purificada y limpia.

El Dr. Stigbe me dice que el paciente de donde proviene estas muestras ha sufrido mucho, -debo aclarar nuevamente que el no sabe que estas muestras vienen de una hostia- y este paciente ha sufrido mucho porque le han golpeado a la altura del pecho y le han provocado un infarto.

Es importante hacer notar que he mencionado la existencia de glóbulos blancos, si uno extrae la sangre de una persona, a los 15 minutos los glóbulos blancos se desintegran; entonces como es posible que hasta el 2005 tengamos glóbulos blancos en la muestra que ha sido extraído en 1996.

Es por esta razón que la conclusión es que el corazón tenia activa dinámica viva en el instante en que se tomo las muestras.

El resultado final de esta investigación se la entregue al Cardenal Bergoglio el día viernes 17 de marzo del 2006 y es cuando me autoriza que yo difunda esta investigación. La hostia que ha sido estudiada es venerada todos los días jueves en la parroquia de Santa Maria en Buenos Aires.

Es interesante saber que en el Siglo VIII hubo un caso parecido en Italia en Lanciano donde un sacerdote dudo si Cristo estaría presente en la Eucaristía y cuando él dudo la hostia se hizo sangre y quedo un tejido que se conserva hasta el día de hoy; en los años 60 la Conferencia Episcopal Italiana pidió que el profesor Oroardo hiciera la investigación y ha demostrado que es músculo del miocardio.

Para mi lo importante es que este resultado que he obtenido de las muestras de ambas hostias son similares a las muestras de la investigación de la ostia del siglo VIII.

A fines de agosto viajo a una ciudad de Korea donde existen ostias que están sangrando y espero obtener los mismos resultados.

Ricardo Castañón Gómez.




"Hermanos: Buscad la paz con todos y la santificación, sin la cual nadie verá al Señor" (Hb. 12,14)


JMS Noticias para todos
-“ … La Santísima Virgen nos dijo, tanto a mis primos como a mí, que 2 eran los últimos remedios que Dios daba al mundo: el Santo Rosario y el Inmaculado Corazón de María…” Lucia vidente de Fatima

Sería bueno que en todos los países se organizaran rosarios por cada advocación mariana. ¡Reza por tu país!

En Argentina se está organizando uno hoy a las 18:30. Pero si no puedes, rézalo a cualquier hora, dondequiera que estés.





Mensajes de la Santísima Virgen al P. Gobbi, del Movimiento Sacerdotal Mariano:

“Volved a confesaros con frecuencia y orad más. Orad conmigo,
orad con el Santo Rosario.

Lo que el Papa dijo en este lugar (Fulda) corresponde a la verdad. Estáis ya muy cercanos al gran castigo; entonces os digo: entregaos a Mí, y recordad que vuestra arma más eficaz en estos terribles momentos es la del Santo Rosario.

Formáis, pues, mi ejército, que en estos tiempos conduzco a su mayor victoria.”
(8 de septiembre de 1985)

Defiende a tu familia y a tu patria en esta batalla contra Belial que pronto terminará, según las apariciones reconocidas por la Iglesia en San Nicolás, Argentina. Conviértete en parte del ejército de María: confiésate y comulga frecuentemente y reza el Rosario cada día, al menos una decena (3 minutos!). ¡Súmate al Rosario Viviente escribiéndonos.


EXHORTA EL PAPA A REZAR EL ROSARIO POR LA PAZ
E
l Santo Padre Juan Pablo II
29-9-2002

“Deseo encomendar a la oración del Rosario una vez más la causa de la paz. Estamos ante una situación internacional llena de tensiones, en ocasiones incandescentes. En algunas partes del mundo, donde el enfrentamiento es más fuerte –pienso en particular en la martirizada tierra de Cristo- se puede constatar que poco sirven los intentos de la política –siempre necesarios- si los ánimos permanecen exacerbados y no son capaces de una nueva mirada de corazón para retomar con esperanza el diálogo.”

Buscando el diálogo y con éste la unión de los pueblos, es decir la paz tan ansiada por todos, pero poniendo únicamente la esperanza de la victoria sobre el mal en Dios, se alcanzarán los frutos buscados; por el contrario sin el recurso humilde a Dios, nada se logrará de bien, sino sólo aumentar la tensión, la guerra y el terrorismo.

“Ahora bien, ¿quién puede infundir estos sentimientos? ¿No es acaso Dios? Es más necesario que nunca que se eleve a Él desde todo el mundo la invocación por la paz. Precisamente en esta perspectiva,
el Rosario se revela una oración particularmente indicada. Construye la paz, pues al mismo tiempo que hace un llamamiento a la gracia de Dios, siembra también en quien lo reza esa semilla de bien, de la que se pueden esperar los frutos de justicia y de solidaridad en el vida personal y comunitaria.”

Pienso en las naciones, pero también pienso en las familias. ¡Cuánta paz se aseguraría en las relaciones familiares, si se retomara el rezo del Santo Rosario en familia!”


Durante el ángelus, el domingo 26 de octubre 1997, el Papa dijo:

Amadísimos hermanos y hermanas:

1. El mes de octubre está dedicado a la oración del rosario, oración popular por excelencia, pues pertenece al patrimonio espiritual de todo el pueblo de Dios.

Mis predecesores amaron mucho esta oración, que Pío XII, de venerada memoria, definió "compendio de todo el Evangelio" (Carta al arzobispo de Manila: AAS 38 [1946] 419).

Mientras se acerca a su fin el primer año de preparación inmediata para el jubileo del año 2000, dedicado a Cristo Salvador, me agrada recordar lo que escribió el Papa Pablo VI en la exhortación apostólica Marialis cultus: "El rosario, oración evangélica centrada en el misterio de la Encarnación redentora, es (...) oración de sentido profundamente cristológico. En efecto, su elemento más característico la repetición litánica del "Dios te salve, María" (...), constituye la trama sobre la cual se desarrolla (...) la meditación de los misterios de la vida del Señor, vistos a través del corazón de la mujer que estuvo más cerca del Señor" (nn. 46-47: AAS 66 [1974] 155-156).

2. ¡Cuántas veces, a lo largo de la historia, la Iglesia ha recurrido a esta oración, especialmente en los momentos de particular dificultad! El santo rosario ha sido instrumento privilegiado para evitar el peligro de la guerra y obtener de Dios el don de la paz. La Virgen, al aparecerse en Fátima a los tres pastorcitos, hace ya ochenta años, ¿no pidió el rezo del rosario por la conversión de los pecadores y la paz en el mundo?

¿Y cómo podría faltar la oración por la paz, al término de un siglo que ha conocido guerras terribles y que, por desgracia, sigue experimentado violencia y conflictos? Ojalá que, durante estos años que nos preparan para el tercer milenio cristiano, el rosario de María nos ayude a implorar a Dios la reconciliación y la paz de toda la humanidad.

3. Pero la paz del mundo pasa también a través de la paz de las familias, células fundamentales de la gran familia humana. Por eso, la Iglesia les presta especial atención, como ha testimoniado el reciente Encuentro mundial de Río de Janeiro.

Quisiera hoy volver a proponer a todas las familias cristianas la oración del rosario, para que puedan gustar la belleza de reunirse a meditar, con María, en los misterios gozosos, dolorosos y gloriosos de nuestra redención, y santificar así tanto los momentos alegres como los difíciles de la vida diaria. Orar juntos ayuda a la familia a estar más unida, a mantenerse más serena y a ser más fiel al Evangelio.

Que María, Reina del santo rosario, sea maestra y guía de todas las familias en esta oración, que amo particularmente.

sitio oficial de Un Rosario por Argentina Aquí







Dios nos ha llamado y nos capacita a todos a ser santos: "Sean santos... porque Yo, el Señor, soy santo" (Lev 19,2; Mt 5, 48). Cristo vino al mundo para hacer posible nuestra santidad. Es por eso que en el Nuevo Testamento se le llama "santos" a los cristianos (1Cor 1, 12; Rm 1, 5; 1Pe 1, 15-16). Son santos solo si viven su fe (Apoc 21, 2.10). Los santos del cielo murieron en gracia de Dios. Su santidad comenzó en la tierra.

Los santos «han entregado su vida a la causa de nuestro Señor Jesucristo» (Hechos de los Apóstoles,15, 26).

Papa Benedicto XVI: "El santo es aquel que está tan fascinado por la belleza de Dios y por su perfecta verdad que éstas lo irán progresivamente transformando. Por esta belleza y verdad está dispuesto a renunciar a todo, también a sí mismo. Le es suficiente el amor de Dios, que experimenta y transmite en el servicio humilde y desinteresado del prójimo".

Los hombres perdimos la vida de gracia al apartarnos de Dios por el pecado, pero Jesucristo nos reconcilió con el Padre muriendo por nosotros en la Cruz. Por el bautismo recibimos los méritos de ese sacrificio de Cristo, somos liberados del pecado e injertados en Cristo para ser Hijos de Dios y participar de su santidad. San Pablo usa la palabra "santos" para referirse a los fieles que viven la nueva vida en el Espíritu Santo. (2 Cor. 13,12; Ef. 1,1)

La Iglesia es una gran familia en la que Dios es Padre, Jesús el Hermano Mayor, el Espíritu Santo es el santificador que comunica amor entre los miembros de tal manera que, aunque no los hemos visto, podemos llegar a conocer y amar mucho a los santos. Ellos nos enseñan, guían e interceden por nosotros. María es la madre de la familia santa.

Aunque Jesucristo, el Sol de Justicia, ha sido rechazado por la humanidad, el cielo de la Santa Iglesia no ha dejado de tener su luz que ilumina a quien abra su corazón. Los santos son esas personas heroicas que brillan con el Señor.

Se le llama santo a lo que está consagrado al servicio de Dios, sea persona, cosa, lugar, tiempo.

El Grupo Belen Misionero, ha lanzado una propuesta que Encuentro de oracion y fe quiere compartir con todos REalizar una pequeña reunion o fiesta de visperas de Todos los Santos, donde invitan a jóvenes y niños de todas las edades a disfrazarse de Santos de nuestra historia, San Francisco de Asis, San Cayetano, Santa Teresita, Santa Rita etc. y de esta manera recordarlos , asi en vez de festejar con costumbres paganas de otros países alentariamos a nuestros niños a creer en Dios siguiendo el ejemplo de nuestros Santos que dieron su vida sintiendo un Amor incondicional por Dios Nuestro Señor,

«todos los seres humanos son hijos de Dios, y todos tienen que llegar a ser lo que son, a través del camino exigente de la libertad».

«Dios les invita a todos a formar parte de su pueblo santo. El “Camino” es Cristo, el Hijo, el Santo de Dios: nadie puede llegar al Padre si no por Él».

"Los santos no son personas que nunca han cometido errores o pecados, sino quienes se arrepienten y se reconcilian". Dijo Benedicto XVI comentando sobre San Pablo y Bernabé. Añadió: "Por tanto, también entre los santos se dan contrastes, discordias, controversias...Son hombres como nosotros, con problemas complicados... La santidad crece con la capacidad de conversión, de arrepentimiento, de disponibilidad para volver a comenzar, y sobre todo con la capacidad de reconciliación y de perdón". "Y todos podemos aprender este camino de santidad". -31 enero 2007 Benedicto XVI.

Perseverar en la santidad es mantenerse en comunión con Cristo quien salva y da vida eterna. Dios quiere que todos se salven (1Tm 2,4), pero no todos se abren a la gracia que santifica. Para salvarse es necesario renunciar al pecado y seguir a Cristo con fe. Por eso San Pablo nos exhorta: "Hermanos: Buscad la paz con todos y la santificación, sin la cual nadie verá al Señor" (Hb. 12,14)Al final no importara otra cosa, la única verdadera desgracia es no ser santos.

La Biblia nos exhorta a seguir el ejemplo de los santos (CF. Dan 7, 22-25; Sab 5, 5). La Iglesia continúa esa tradición y reconoce la santidad después de un largo y cuidadoso proceso en el que examina las vidas de los candidatos.





lunes, 26 de octubre de 2009

El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré? El Señor es la defensa de mi vida, cuando me asaltan mis enemigos, tropiezan y caen.


JMS Evangelio del dia 26 de Octubre Recordando a Jesús Misericordioso
Evangelio

Un sábado, estaba Jesús enseñando en una sinagoga. Había allí una mujer que llevaba dieciocho años enferma por causa de un espíritu malo; estaba encorvada y no podía enderezarse. Al verla, Jesús la llamó y le dijo:
"Mujer, quedas libre de tu enfermedad".
Le impuso las manos y, al instante, la mujer se enderezó y empezó a alabar a Dios.
Pero el jefe de la sinagoga, indignado de que Jesús hubiera hecho una curación en sábado, le dijo a la gente:

"Hay seis días de la semana en que se puede trabajar; vengan, pues, durante esos días a que los curen y no el sábado".
Entonces el Señor dijo:
"¡Hipócritas! ¿Acaso no desata cada uno de ustedes su buey o su burro del pesebre para llevarlo a abrevar, aunque sea sábado? Y a esta hija de Abrahán, a la que Satanás tuvo atada durante dieciocho años, ¿no era bueno desatarla de esa atadura, aun en día de sábado?"
Cuando Jesús dijo esto, sus enemigos quedaron en vergüenza; en cambio, la gente se alegraba de todas las maravillas que él hacía.
Lucas 13, 10-17
Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.

Oremos:
Dios nuestro, de quien todo bien procede, inspíranos propósitos de justicia y santidad y concédenos tu ayuda para poder cumplirlos.
Por nuestro Señor Jesucristo...


Reflexión

La mujer quedó libre del mal espíritu que la tenía encadenada y de la enfermedad del cuerpo. Ya podía mirar a Cristo, y al Cielo, y a las gentes, y al mundo. Nosotros hemos de meditar muchas veces estos pasajes en los que la compasiva misericordia del Señor, de la que tan necesitados andamos, se pone singularmente de relieve. “Esa delicadeza y cariño la manifiesta Jesús no solo con un grupo pequeño de discípulos, sino con todos. Con las santas mujeres, con representantes del Sanedrín como Nicodemo y con publicanos como Zaqueo, con enfermos y con sanos, con doctores de la ley y con paganos, con personas individuales y con muchedumbres enteras.

“Nos narran los Evangelios que Jesús no tenía dónde reclinar su cabeza, pero nos cuentan también que tenía amigos queridos y de confianza, deseosos de acogerlo en su casa. Y nos hablan de su compasión por los enfermos, de su dolor por los que ignoran y yerran, de su enfado ante la hipocresía”.

La consideración de estas escenas del Evangelio nos debe llevar a confiar más en Jesús, especialmente cuando nos veamos más necesitados del alma o del cuerpo, cuando experimentemos con fuerza la tendencia a mirar solo lo material, lo de abajo, y a imitarle en nuestro trato con las gentes: no pasemos nunca con indiferencia ante el dolor o la desgracia. Hagamos igual que el Maestro, que se compadece y pone remedio.

“Así encontró el Señor a esta mujer que había estado encorvada durante dieciocho años: no se podía erguir (Lc 13, 11). Como ella –comenta San Agustín– son los que tienen su corazón en la tierra”4; después de un tiempo han perdido la capacidad de mirar al Cielo, de contemplar a Dios y de ver en Él la maravilla de todo lo creado. “El que está encorvado, siempre mira a la tierra, y quien busca lo de abajo, no se acuerda de a qué precio fue redimido”. Se olvida de que todas las cosas creadas han de llevarle al Cielo y contempla solo un universo empobrecido.

El demonio mantuvo dieciocho años sin poder mirar al Cielo a la mujer curada por Jesús. Otros, por desgracia, pasan la vida entera mirando a la tierra, atados por la concupiscencia de la carne, la concupiscencia de los ojos y la soberbia de la vida. La concupiscencia de la carne impide ver a Dios, pues solo lo verán los limpios de corazón; esta mala tendencia “no se reduce exclusivamente al desorden de la sensualidad, sino también a la comodidad, a la falta de vibración, que empuja a buscar lo más fácil, lo más placentero, el camino en apariencia más corto, aun a costa de ceder en la fidelidad a Dios .

“El otro enemigo es la concupiscencia de los ojos, una avaricia de fondo, que lleva a no valorar sino lo que se puede tocar. Los ojos que se quedan como pegados a las cosas terrenas, pero también los ojos que, por eso mismo, no saben descubrir las realidades sobrenaturales. Por tanto, podemos utilizar la expresión de la Sagrada Escritura, para referirnos a la avaricia de los bienes materiales, y además a esa deformación que lleva a observar lo que nos rodea –los demás, las circunstancias de nuestra vida y de nuestro tiempo– solo con visión humana.

Ninguno de estos enemigos podrá con nosotros si tenemos la sinceridad necesaria para descubrir sus primeras manifestaciones, por pequeñas que sean, y suplicamos al Señor que nos ayude a levantar de nuevo nuestra mirada hacia Él.


La fe en Cristo se ha de manifestar en los pequeños incidentes de un día corriente, y ha de llevarnos a “organizar la vida cotidiana sobre la tierra sabiendo mirar al Cielo, esto es, a Dios, fin supremo y último de nuestras tensiones y nuestros deseos”.

Cuando, mediante la fe, tenemos la capacidad de mirar a Dios, comprendemos la verdad de la existencia: el sentido de los acontecimientos, que tienen una nueva dimensión; la razón de la cruz, del dolor y del sufrimiento; el valor sobrenatural que podemos imprimir a nuestro trabajo diario y a cualquier circunstancia que, en Dios y por Dios, recibe una eficacia sobrenatural.

“Quietud.Paz. Vida intensa dentro de ti. Sin galopar, sin la locura de cambiar de sitio, desde el lugar que en la vida te corresponde, como una poderosa máquina de electricidad espiritual, ¡a cuántos darás luz y energía!..., sin perder tu vigor y tu luz”.

Acudamos a la misericordia del Señor para que nos conceda ese don, vivir de fe, para poder andar por la tierra con los ojos puestos en el Cielo, con la mirada fija en Él, en Jesús.

Jesús Misericordioso nos espera Hoy 26 de Octubre en su Santuario en Villa Urquiza Buenos Aires Argentina especialmente hoy habrá misas e imposicion de manos todo el día. Rezamos juntos la oración de Jesús pidiendo Misericordia para nosotros y el mundo entero.

Señor Jesús,
en la cruz manifestaste tu obediencia al Padre
y tu voluntad de salvación universal:
venimos a implorarte perdón
y a darte gracias por tu amor.

Queremos hacer conocer tu Evangelio
mediante las obras de misericordia
para la conversión de los pecadores,
el consuelo de los afligidos,
y la asistencia a los pobres y enfermos.

Envíanos tu Espíritu Santo,
pues necesitamos sanar nuestra libertad humana
para construir un mundo donde reine la misericordia
y se anticipe el Banquete definitivo.

Ayúdanos a dar testimonio de fe y esperanza
delante de nuestros hermanos, varones y mujeres,
para que comprendamos todos
que la felicidad perfecta se encuentra en Ti.

Indícanos el camino hacia el Padre,
para llegar a adorar el Misterio de la Trinidad
junto a María y los Santos. Amén.

Padre Nuestro, Ave Maria Y Gloria.

sábado, 24 de octubre de 2009

Tengo los ojos puestos en el Señor, porque él me libra de todo peligro. Mírame, Dios mío, y ten piedad de mí, que estoy solo y afligido.


JMS Evangelio del dia 24 de Octubre y Santoral
Evangelio según san Lucas 13, 1-9
En aquel tiempo algunos hombres fueron a ver a Jesús y le contaron que Pilato había mandado matar a unos galileos mientras estaban ofreciendo sus sacrificios. Jesús les hizo este comentario: "¿Piensan ustedes que aquellos galileos, porque les sucedió esto, eran más pecadores que todos los demás galileos? Ciertamente que no; y si ustedes no se convierten, perecerán de manera semejante.
Y aquellos dieciocho que murieron aplastados por la torre de Siloé, ¿piensan acaso que eran más culpables que todos los demás habitantes de Jerusalén? Ciertamente que no; y si ustedes no se arrepienten, perecerán de manera semejante".
Entonces les dijo esta parábola: "Un hombre tenía una higuera plantada en su viñedo, fue a buscar higos y no los encontró.
Dijo entonces al viñador:
Mira, durante tres años seguidos he venido a buscar higos en esta higuera y no los he encontrado. Córtala. ¿Para qué ocupa la tierra inútilmente?
El viñador le contestó:
Señor, déjala todavía este año; voy a aflojar la tierra alrededor y a echarle abono para ver si da fruto; si no, el año que viene la cortaré".


Reflexion

La higuera simboliza a Israel2, que no supo corresponder a los desvelos que Yahvé, dueño de la viña, manifestó una y otra vez sobre él, y representa también a todo aquel que permanece improductivo3 de cara a Dios. El Señor nos ha colocado en el mejor lugar, donde podemos dar más frutos según las propias condiciones y gracias recibidas, y hemos sido objeto de los mayores cuidados del más experto viñador, desde el momento mismo de nuestra concepción: nos dio un Ángel Custodio para que nos protegiera hasta el final de la vida, recibimos, quizá a los pocos días de nacer, la gracia inmensa del Bautismo, se nos dio Él mismo como alimento en la Sagrada Comunión, hemos tenido la oportunidad de recibir una formación cristiana... Incontables han sido las gracias y favores del Espíritu Santo. Sin embargo, es posible que el Señor encuentre a veces pocos frutos en nuestra vida, y quizá, en alguna ocasión, frutos amargos. Es posible que, alguna vez, nuestra situación personal haya podido recordar la desconsolada parábola que relata el Profeta Isaías: Voy a cantar a mi amado el canto de la viña de mis amores: Tenía mi amado una viña en un fértil recuesto. La cavó, la descantó y la plantó de vides selectas. Edificó en medio de ella una torre e hizo en ella un lagar, esperando que le daría uvas, pero le dio agrazones4, frutos agrios. ¿Por qué estos malos resultados, cuando todo estaba dispuesto para que fueran buenos? San Ambrosio señala que las causas de la esterilidad son, frecuentemente, la soberbia y la dureza de corazón5.

A pesar de todo, Dios vuelve una y otra vez con nuevos cuidados: es la paciencia de Dioscon el alma. Él no se desanima ante nuestras faltas de correspondencia, sabe esperar, pues, junto a nuestras flaquezas y a la debilidad, conoce a la vez la capacidad de bien que hay en cada hombre, en cada mujer. El Señor no da nunca a nadie por perdido, confía en todos nosotros, aunque no siempre hayamos respondido a sus esperanzas.


Yo vine al mundo, para que tengan vida y la tengan en abundancia, dice el Señor.

Cada persona tiene una vocación particular, y toda vida que no responde a ese designio divino se pierde. El Señor espera correspondencia a tantos desvelos, a tantas gracias concedidas, aunque nunca podrá haber paridad entre lo que damos y lo que recibimos, “pues el hombre nunca puede amar a Dios tanto como Él debe ser amado”; sin embargo, con la gracia sí que podemos ofrecerle cada día muchos frutos de amor: de caridad, de apostolado, de trabajo bien hecho... Cada noche, en el examen de conciencia, hemos de saber encontrar esos frutos pequeños en sí mismos, pero que han hecho grandes el amor y el deseo de corresponder a tanta solicitud divina. Y cuando salgamos de este mundo “tenemos que haber dejado impreso nuestro paso, dejando a la tierra un poco más bella y al mundo un poco mejor”, una familia con más paz, un trabajo que ha significado un progreso para la sociedad, unos amigos fortalecidos con nuestra amistad...

Examinemos en nuestra oración: si tuviéramos que presentarnos ahora delante del Señor, ¿nos encontraríamos alegres, con las manos llenas de frutos para ofrecer a nuestro Padre Dios? Pensemos en el día de ayer..., en la última semana..., y veamos si estamos colmados de obras hechas por amor al Señor, o si, por el contrario, una cierta dureza de corazón o el egoísmo de pensar excesivamente en nosotros mismos está impidiendo que demos al Señor todo lo que espera de cada uno. Bien sabemos que, cuando no se da toda la gloria a Dios, se convierte la existencia en un vivir estéril. Todo lo que no se hace de cara a Dios, perecerá. Aprovechemos hoy para hacer propósitos firmes. “Dios nos concede quizá un año más para servirle. No pienses en cinco, ni en dos. Fíjate solo en este: en uno, en el que hemos comenzado...”, en el que ya falta poco para terminar.

Hoy se Recuerda a

Rafael Arcángel Arcángel, 24 de octubre

Rafael Arcángel

Octubre 24

Etimológicamente significa “ Dios le curó, medicina de Dios”.Viene de la lengua hebrea.

Dice Pablo:” Nada hagáis por la contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo”.

Aunque ya ha pasado al 29 de septiembre, sin embargo hay ciudades que no lo han cambiado, como Córdoba, por ejemplo.

La historia de san Rafael se conoce por la Biblia. Fue enviado por Dios para que le ayudara a Tobías, a quien, para probar su paciencia, le había quitado la vista y los bienes.

También vino el arcángel de parte de Dios para que auxiliara a una joven llamada Sara.

Ya se había casado siete veces. Pero nunca pudo acostarse con ninguno de ellos porque un demonio se los mataba.

San Rafael se le apareció como un joven elegante al anciano Tobías.

Este se puso contento en poder acompañar a su hijo para que cobrase dinero.

Mientras iban de camino, al lavarse el joven Tobías los pies, vio que iba hacia él un pescado muy grande.

Lo cogió, y guardó la hiel, el hígado y el corazón.

Aconsejado por el ángel, lanzó Tobías al demonio de la habitación de Sara con el hígado del pescado.

Y ya pudo casarse con ella. De vuelta a la casa de su padre, le dio la vista con la hiel del mismo pescado.

Cuando le preguntaron al extraño visitante quién era. Contestó:"Yo soy el ángel Rafael, uno de los siete espíritus que asisten delante del Señor".

jueves, 22 de octubre de 2009

El Señor es mi protector; él me libró de las manos de mis enemigos y me salvó, porque me ama.


JMS Evangelio del dia 23 de Octubre
Señor, Dios mío: en tus manos abandono lo pasado y lo presente y lo futuro, lo pequeño y lo grande, lo poco y lo mucho, lo temporal y lo eterno.Santo Dios, Santo fuerte, Santo inmortal, ten piedad de nosotros.Cúmplase la justísima, altísima y amabilísima voluntad de Dios, y eternamente sea alabada y exaltada en todas las cosas.
Evangelio
En aquel tiempo dijo Jesús a la multitud:
"Cuando ustedes ven que una nube se va levantando por el poniente, enseguida dicen que va a llover y, en efecto, llueve.
Cuando el viento sopla del sur, dicen que hará calor, y así sucede. ¡Hipócritas! Si saben interpretar el aspecto que tienen el cielo y la tierra, ¿por qué no interpretan entonces los signos del tiempo presente? ¿Por qué, pues, no juzgan por ustedes mismos lo que les conviene hacer ahora?
Cuando vayas con tu adversario a presentarte ante la autoridad, haz todo lo posible por llegar a un acuerdo con él en el camino, para que no te lleve ante el juez, el juez te entregue a la policía, y la policía te meta en la cárcel. Yo te aseguro que no saldrás de allí hasta que pagues el último centavo".
Lucas 12, 54-59
Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.



Bendeciré al Señor, que me aconseja, hasta de noche me instruye internamente. Tengo siempre presente al Señor y con él a mi lado jamás tropezaré.
Tú, Señor, eres mi herencia.


Meditacion

El Señor sigue pasando cerca de nuestra vida, con suficientes referencias, y cabe el peligro de que en alguna ocasión no le reconozcamos. Se hace presente en la enfermedad o en la tribulación, que nos purifica si sabemos aceptarla y amarla; está, de modo oculto pero real, en las personas que trabajan en la misma tarea y que necesitan ayuda, en aquellas otras que participan del calor del propio hogar, en las que cada día encontramos por motivos tan diversos... Jesús está detrás de esa buena noticia, y espera que vayamos a darle las gracias, para concedernos otras nuevas. Son muchas las ocasiones en que se hace encontradizo... ¡Qué pena si no supiésemos reconocerle por ir excesivamente preocupados o distraídos, o faltos de piedad, de presencia de Dios!

¿No sería nuestra vida bien distinta si fuéramos más conscientes de esa presencia divina? ¿No es cierto que desaparecería mucha rutina, malhumor, penas y tristezas...? ¿Qué nos importaría entonces representar un papel u otro, si sabemos que a Dios le gusta y aprecia el que nos ha tocado? “Si viviéramos más confiados en la Providencia divina, seguros de esta protección diaria que nunca nos falta, cuántas preocupaciones o inquietudes nos ahorraríamos. Desaparecerían tantos desasosiegos que, con frase de Jesús, son propios de los paganos, de los hombres mundanos (Lc 12, 30), de las personas que carecen de sentido sobrenatural”, de quienes viven como si el Maestro no se hubiera quedado con nosotros.

El Evangelio de la Misa de hoy termina con estas palabras de Jesús: Cuando vayas con tu adversario al magistrado, procura ponerte de acuerdo con él en el camino, no sea que te obligue a ir al juez, y el juez te entregue al alguacil y el alguacil te meta en la cárcel... Todos vamos por el camino de la vida hacia el juicio. Aprovechemos ahora para olvidar agravios y rencores, por pequeños que sean, mientras queda algo de trayecto por recorrer. Descubramos los signos que nos señalan la presencia de Dios en nuestra vida. Luego, cuando llegue la hora del juicio, será ya demasiado tarde para poner remedio. Este es el tiempo oportuno de rectificar, de merecer, de amar, de reparar. El Señor nos invita hoy a descubrir el sentido profundo del tiempo, pues es posible que todavía tengamos pequeñas deudas pendientes: deudas de gratitud, de perdón, incluso de justicia...
Meditemos este cuento y Oremos

EL NIÑO EN EL TABERNÁCULO
Un modelo para nuestra fe


"Yo os aseguro: el que no reciba el Reino de Dios como niño, no entrará en él". (Lc. 18, 17)
* * *

[Misionero predicando a los niños. Estampa religiosa francesa de finales del siglo XIX]Discípulos de la eucaristía venid y escuchad esta maravillosa historia que revela a Jesús en el Sacramento del altar. Me fue contada en un reciente un viaje a la Inglaterra protestante.

Sucedió un día que un buen y santo misionero, mientras predicaba por los campos de ese país, consiguió reunir en torno a si a un grupo de niños pequeños. Como tema de su predicación eligió enseñarles la presencia real de Jesús en el Tabernáculo. Con su corazón embargado por la emoción les habló a los niños de cómo Jesús, por obra de un dulce milagro, permanece siempre encerrado y cautivo en los altares de nuestras iglesias esperando nuestra visita.

Nada más escuchar esto sucedió que uno de los niños se levantó apresuradamente de en medio del grupo y sin perder un instante salió corriendo en dirección a la iglesia más cercana. Una vez en su interior se acercó al Tabernáculo y aunque era todavía demasiado pequeño, consiguió con gran esfuerzo subirse a lo alto del altar y sentarse a su lado. Fue entonces cuando con una fe pura e ingenua, comenzó a llamar a Nuestro Señor mientras golpeaba con suavidad la puertecita:

[Niño llamando a la puerta del Tabernáculo. Estampa religiosa francesa de finales del siglo XIX]- Jesús, ¿estás allí?...

Pero nadie contestó a su llamada. Sin desanimarse a esta conmovedora audacia propia de su corta edad, volvió de nuevo a golpear esta vez un poco más fuerte la puerta con los nudillos de pequeña manita:

- ¿Estás allí, Jesús?. Por favor contéstame... como nos dicen que lo haces siempre en la clase de catecismo…

Y esperó unos instantes... Pero pesar de que prestaba mucha atención sus oídos no conseguían escuchar ningún sonido del interior del Tabernáculo. "Debe ser que Jesús esta ahora dormido", pensó entonces el niño. Y decidido, se dijo a si mismo: "Voy a despertarlo con delicadeza para no asustarlo".

- Oh mi pequeño Jesús, te quiero, te adoro, creo en Ti, contéstame. Yo te suplico que me hables…

¡Oh gracia! ¡Oh prodigio! ¡Oh milagro!… Ante esta oración de tanta ternura Jesús ya no pudo resistir más y desde el fondo de su Tabernáculo dejó escapar finalmente su voz:

- Soy Jesús y vivo en este lugar donde mi inmenso amor por los hombres me tiene prisionero. Desde aquí consuelo a todo el que llora. Y tu, mi amado niño, ¿qué es lo que quieres de mi?

El niño, ya muy contento, le respondió con voz candorosa:

- Es mi padre…. No se encuentra bien... Te pido por favor que lo conviertas. Haz que te conozca y ame tu nombre...

[Jesús prisionero del amor al hombre en el sacramento del altar, espera nuestra visita. Estampa religiosa francesa de finales del siglo XIX]-Hágase como quieres. Te concedo tu deseo - le respondió Jesús. Anda, vete ahora a tu casa que ya la tarde está cayendo y tus padres te están esperando .

Desbordado por la alegría de haber haber sido escuchado por Jesús, el niño regresó a su casa mas obediente y piadoso que nunca. Al día siguiente se obró un milagro conmovedor: sin que hubiera contado nada de lo sucedido en la iglesia, su padre tomó la repentina decisión de acudir a la Iglesia y confesarse tras haber permanecido muchos años completamente alejado de ella. Cuando regresó a su casa, volvió como un hombre nuevo renacido a la fe.

Y así termina esta historia que me contaron en la Inglaterra protestante. ¡Oh Jesús! gran amigo de los niños y lleno de compasión con los pobres pecadores, ¿quién dejará de reconocer tu infinita bondad en el relato de esta historia que me contaron? Yo la recordaré por siempre… Y también llamaré a tu puerta todos los días. Si no consigo oír tu voz como aquel niño, poco importa pues se que tu corazón siempre me escucha.

Oh Jesús, que te quedaste con nosotros, prisionero en el Sagrario, haz que te llevemos constantemente en nuestro corazón para que, haciéndote así agradable compañía en la tierra, merezcamos estar un día contigo en el cielo.



Devocionario catolico

miércoles, 21 de octubre de 2009

Escucha, Señor, mi voz y mis clamores y ven en mi ayuda; no me rechaces, ni me abandones, Dios, salvador mío.


JMS Evangelio del dia 21 de Octubre y Meditacion Cristiana
“Cuando tu voluntad flaquee ante el trabajo habitual, recuerda una vez más aquella consideración: “el estudio, el trabajo, es parte esencial de mi camino. El descrédito profesional –consecuencia de la pereza– anularía o haría imposible mi labor de cristiano. Necesito –así lo quiere Dios– el ascendiente del prestigio profesional, para atraer y ayudar a los demás”.


Evangelio

En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Fíjense en esto: Si un padre de familia supiera a qué hora va a venir el ladrón, estaría vigilando y no dejaría que se le metiera por un boquete en su casa.

Pues también ustedes estén preparados, porque a la hora en que menos lo piensen, vendrá el Hijo del hombre”. Entonces Pedro le preguntó a Jesús: “¿Dices esta parábola sólo por nosotros o por todos?”

El Señor le respondió:

“Supongan que un administrador, puesto por su amo al frente de la servidumbre con el encargo de repartirles a su tiempo los alimentos, se porta con fidelidad y prudencia. Dichoso ese siervo, si el amo, a su llegada, lo encuentra cumpliendo con su deber. Yo les aseguro que lo pondrá al frente de todo lo que tiene.

Pero si ese siervo piensa: ‘Mi amo tardará en llegar’ y empieza a maltratar a los otros siervos y siervas, a comer, a beber y a embriagarse, el día menos pensado y a la hora más inesperada llegará su amo y lo castigará severamente y le hará correr la misma suerte de los desleales.

El siervo que conociendo la voluntad de su amo, no haya preparado ni hecho lo que debía, recibirá muchos azotes; pero el que, sin conocerla, haya hecho algo digno de castigo, recibirá pocos. Al que mucho se le da, se le exigirá mucho; y al que mucho se le confía, se le exigirá mucho más”.
Lucas (12, 39-48

Reflexión;

Démosle el gusto al Señor de premiarnos. Eso es lo que El quiere hacer. De última también puede perdonarnos, y hasta castigarnos. Que las circunstancias no se den como para obligar a Dios que se cumpla lo que El no quiere que se dé. Él nos hizo libres para que pudiéramos amarlo, ya que donde no hay libertad no hay amor, nadie ama por obligación. Esta es nuestra oportunidad para amarlo, y para eso sólo tenemos una vida.

Propósito del día:
Donaré a mi parroquia algunos alimentos para las familias más necesitadas

"No lo dudes: si abandonas tu tarea, ¡te apartas –y apartas a otros– de los planes divinos!”

Meditemos hoy si nuestra vida es una verdadera respuesta a lo que Dios espera de nosotros.


El Señor ha llegado ya y está todos los días entre nosotros. Es a Él a quien en cada jornada dirigimos nuestra mirada para comportarnos como el hijo delante de su Padre, como el amigo delante del Amigo. Y cuando, dentro de un tiempo no muy largo, al fin de la vida, le demos cuenta de la administración que hicimos de sus bienes, se llenará nuestro corazón de alegría al ver esa fila interminable de personas que, con la gracia y nuestro empeño, se acercaron a Él. Comprenderemos que nuestras acciones fueron como “la piedra caída en el lago”, con una resonancia inmensa a nuestro alrededor; y esto gracias a la fidelidad diaria a nuestros deberes, quizá no muy brillantes externamente, a la oración y al sencillo pero firme y constante apostolado con los amigos, con los parientes, con aquellos que pasaron cerca de nuestra vida.

De hecho, el mismo Jesús anunció a sus discípulos: En verdad, en verdad os digo: el que cree en Mí, también él hará las obras que Yo hago, y las hará mayores que estas porque Yo voy al Padre Jn 14, 12. San Agustín comenta así estas palabras del Señor: “No será mayor que yo el que en mí cree; sino que yo haré entonces cosas mayores que las que ahora hago; realizaré más por medio del que crea en mí, que lo que ahora realizo por mí mismo”coment.San Juan, 72, 1. ¡Tantas maravillas lleva a cabo a través de nuestra pequeñez cuando le dejamos! Las obras mayores “consisten esencialmente en dar a los hombres la vida divina, la fuerza del Espíritu y, por lo tanto, en su adopción como hijos de Dios . De hecho, Jesús dice: porque Yo voy al Padre. La marcha de Jesús no interrumpe su actividad de salvación del mundo, sino que asegura su crecimiento y expansión; no significa la separación de los suyos, sino su presencia en ellos, real aunque invisible. La unidad con Él, resucitado, es lo que les hace capaces de hacer obras mayores, de reunir a los hombres con el Padre y entre ellos. De nosotros depende que Jesús vuelva a pasar por la tierra para cumplir su obra: Él obra a través de nosotros, si le dejamos hacer a Él.

“También para venir por vez primera a la tierra, Dios pidió consentimiento a María, una de nosotros. María creyó: dio su adhesión total a los planes del Padre. Y ¿qué obra dio como fruto su fe? Por su “sí” el Verbo se hizo carne (Jn 1, 14) en Ella y se hizo posible la salvación de la humanidad”. A Nuestra Señora también le pedimos nosotros que nos ayude a cumplir todo aquello que su Hijo nos ha encomendado: un apostolado eficaz en el ambiente en el que nos encontramos.

Oremos juntos;

Dios nuestro, fuerza de todos los que en ti confían, ayúdanos con tu gracia, sin la cual nada puede nuestra humana debilidad, para que podamos serte fieles en la observancia de tus mandamientos.

Escucha esta hermosa canción de la hermana Glenda mientras meditas Lo que Dios Quiere De Tí, y Dile secretamente en tu interior Hagase en mi tu voluntad, Señor!




martes, 20 de octubre de 2009

Dios nuestro, de quien todo bien procede, inspíranos propósitos de justicia y santidad y concédenos tu ayuda para poder cumplirlos.


JMS Evangelio del dia 20 de Octubre y Meditacion
El Señor es mi luz y mi salvación . Concédenos, Señor, hacer tu voluntad


Evangelio

En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Estén listos, con la túnica puesta y las lámparas encendidas. Sean semejantes a los criados que están esperando a que su señor regrese de la boda, para abrirle en cuanto llegue y toque. Dichosos aquellos a quienes su señor, al llegar, encuentre en vela. Yo les aseguro que se recogerá la túnica, los hará sentar a la mesa y él mismo les servirá.

Y si llega a medianoche o a la madrugada y los encuentra en vela, dichosos ellos”.
Lucas (12, 35-38)

Meditacion

Señor, tú eres mi amor, mi fuerza y mi refugio, mi liberación y mi ayuda. Tú eres mi Dios.

El Señor nos dice una vez más que nuestra actitud ha de ser como la de aquel que está a punto de emprender un viaje, o de quien espera a alguien importante. La situación del cristiano no puede ser de somnolencia y de descuido. Y esto por dos razones: porque el enemigo está siempre al acecho, como león rugiente, buscando a quien devorar, y porque quien ama no duerme. “Vigilar es propio del amor. Cuando se ama a una persona, el corazón vigila siempre, esperándola, y cada minuto que pasa sin ella es en función de ella y transcurre vigilante . Jesús pide el amor. Por eso solicita vigilancia”. En Italia, muy cerca de Castelgandolfo, hay una imagen de la Virgen colocada junto a una bifurcación de carreteras, y tiene la siguiente inscripción: Cor meum vigilat.

El Corazón de la Virgen está vigilante por Amor. Así debe estar el nuestro: vigilante por amor, y para descubrir al Amor que pasa cerca de nosotros. Enseña San Ambrosio que si el alma está adormecida, Jesús se marcha sin haber llamado a nuestra puerta, pero si el corazón está en vela, llama y pide que se le abra. Muchas veces a lo largo del día pasa Jesús a nuestro lado. ¡Qué pena si la tibieza impidiera verlo!

“¡Cuánto te amo, Señor, mi fortaleza, mi alcázar, mi libertad! (Sal 17, 2-3). Eres lo más deseable y amable que puede imaginarse. ¡Dios mío, ayuda mía! Te amaré según me lo concedas y yo pueda, mucho menos de lo debido, pero no menos de lo que puedo... Podré más si aumentas mi capacidad, pero nunca llegaré a lo que te mereces”. No permitas que, por falta de vigilancia, otras cosas ocupen el lugar que solo Tú debes llenar. Enséñame a mantener el alma libre para Ti, y el corazón dispuesto para cuando llegues.

El alma adormecida en la tibieza vive sin verdaderos objetivos en la lucha interior que atraigan e ilusionen. “Se va tirando”. Se ha dejado el empeño por ser mejores, o se lleva una lucha ficticia e ineficaz. Queda en el corazón un vacío de Dios que el tibio intenta llenar con otras cosas, que no son Dios y no llenan; y un especial y característico desaliento impregna toda la vida de relación con el Señor. Se pierde la prontitud y la alegría en la entrega, y la fe queda apagada, precisamente porque se ha enfriado el amor. A un estado de tibieza le ha precedido siempre un conjunto de pequeñas infidelidades, cuya culpa –no zanjada– está influyendo en las relaciones de esa alma con Dios.

Tened ceñidas las cinturas y las lámparas encendidas..., atentos a los pasos del Señor. Es una llamada a mantenernos alerta, con la lucha diaria planteada en puntos muy concretos. Nadie estuvo más atento a la llegada de Cristo a la tierra que su Madre Santa María. Ella nos enseñará a mantenernos vigilantes si alguna vez sentimos que ese mal sueño hace su presencia en el alma.

“¡Señor, qué bueno eres para el que te busca! Y ¿para el que te encuentra?”. Nosotros lo hemos encontrado. No lo perdamos.


Santo del dia 20

Irene de Tancor, Santa Religiosa, Octubre 20

Irene de Tancor, Santa

Religiosa

Etimología: Irene = Aquella que trae la paz. Viene de la lengua griega.

La historia nos dice que esta joven era muy bella y piadosa. Sin orgullo por los dones físicos que Dios le había concedido, ella se dedicó a darle gracias por ellos y a vivir una intimidad muy estrecha con el Señor. No le apetecía presentarse a un concurso de “mises”. Su mejor cualidad residía en su fuerza interior, sí esa que mueve el Espíritu Santo en los corazones. Nació en el lejano siglo VII en la región de Tancor que, más tarde, se llamaría Portugal. La época no le fue muy propicia para vivir en paz. Los musulmanes dominaban ampliamente toda la zona. Ella, sin en embargo, hija de padres cristianos, recibió una esmerada educación en el monasterio. Una vez que hubo terminado sus estudios, volvió a casa con la intención clara de dedicarse a la vida religiosa. Dicen sus biografías que rezaba mucho en casa. Apenas salía. Eso sí, la única salida que hacía era para ir a la Misa. Un apuesto joven puso los ojos en ella y se enamoró locamente de sus encantos. Cuando ella le comunicó que había hecho voto de virginidad, sintió el joven una gran pena en su corazón enamorado. Al principio lo aceptó más o menos bien. Pero a medida que pasaban los días, su mente y su vida entera maquinaban lo peor. Y efectivamente, el chico le pagó a un criminal una cantidad de dinero para que le diese muerte. Cuando su cuerpo joven cayó a tierra sin vida, lo arrojó al río Tajo. Un tío de Irene se enteró del vil asesinato. Fue corriendo a las riberas del río para encontrar su cadáver y llevarlo en procesión al monasterio. Hoy se conoce esta ciudad con el nombre de Santarén (Santa Irene). Es un nombre muy popular en España y Portugal. Murió en el año 653.

Oremos
Resplandezca sobre nosotros,
Padre omnipotente, el esplendor de tu gloria, Cristo, luz de luz, y el don de tu Espíritu Santo confirme los corazones de tus fieles, nacidos a la vida nueva en tu amor.
Por Jesucristo, nuestro Señor, Amén.


lunes, 19 de octubre de 2009

Padre santo,guíanos por medio de tu Espíritu a fin de que, no sólo con palabras, sino con toda nuestra vida podamos demostrarte nuestro amor



JMS Evangelio del dia 19 de Octubre Y Santoral Catolico
Que San Pablo de la Cruz nos obtenga del cielo la gracia de meditar con frecuencia en la Pasión y Muerte de Jesús y así amar mucho y siempre más a nuestro amable Redentor.


Evangelio

En aquel tiempo, hallándose Jesús en medio de una multitud, un hombre le dijo: “Maestro, dile a mi hermano que comparta conmigo la herencia”. Pero Jesús le contestó: “Amigo, ¿quién me ha puesto como juez en la distribución de herencias?” Y dirigiéndose a la multitud, dijo: “Eviten toda clase de avaricia, porque la vida del hombre no depende de la abundancia de los bienes que posea”.

Después les propuso esta parábola: “Un hombre rico tuvo una gran cosecha y se puso a pensar: ‘¿Qué haré, porque no tengo ya en dónde almacenar la cosecha? Ya sé lo que voy a hacer: derribaré mis graneros y construiré otros más grandes para guardar ahí mi cosecha y todo lo que tengo.Entonces podré decirme: Ya tienes bienes acumulados para muchos años; descansa, come, bebe y date a la buena vida’.

Pero Dios le dijo: ‘¡Insensato! Esta misma noche vas a morir. ¿Para quién serán todos tus bienes?’ Lo mismo le pasa al que amontona riquezas para sí mismo y no se hace rico de lo que vale ante Dios”.
san Lucas (12, 13-21)

Tengo los ojos puestos en el Señor, porque él me libra de todo peligro. Mírame, Dios mío, y ten piedad de mí, que estoy solo y afligido.

Reflexión:
Si la avaricia conquista los corazones, no habrá juez capaz de apaciguar a los hermanos. Si no hay avaricia, si prima el amor a Dios y al prójimo, tal vez no habría necesidad de jueces . Pero el pecado existe oculto y latente, y la misión de la segunda persona Divina encarnada en Cristo ha sido descubrirlo y vencerlo por nosotros. Dios ha hecho lo mas importante, a nosotros nos queda aceptarlo y vivirlo. Y si lo vivimos, entonces ni la avaricia ni ningun pecado me separarán de mi hermano.
Propósito del dia: Me encargaré de hacer la bendicion de la mesa y la acción de gracias.

Oremos: Nos postramos, Señor, a tu providencia, que nunca se equivoca, y te pedimos humildemente que apartes de nosotros todo mal y nos concedas aquello que pueda contribuir a nuestro bien.

Amén.


Meditacion

Si estamos cerca de Cristo, poco nos bastará para andar por la vida con la alegría de los hijos de Dios. Si no nos acercamos a Él, nada bastará para llenar un corazón siempre insatisfecho.
En cierta ocasión –cuenta un amigo sacerdote–, hace ya muchos años estaba pasando una corta temporada de prácticas militares en el pueblo más alto de Navarra.
Estas prácticas las hacíamos aprovechando la pausa de nuestros estudios. Recuerdo que cuando estaba yo en aquel pueblecito llamado Abaurrea, se presentó allí un alférez nuevo, flamante. Se presentaba al jefe para que le dijera a qué unidad iba destinado. Volvió diciendo que el jefe le había dicho que tenía que ir a Jaurrieta y que, así, como sin darle importancia, le había insinuado que tenía que tomar un caballo e irse en él (...). El nuevo estaba muy inquieto y toda la cena estuvo hablando del caballo, preguntando cosas, pidiendo algún consejo práctico. Entonces, uno de los que había allí dijo:

»—Tú lo que tienes que hacer es montarte sereno, con tranquilidad y que no se dé cuenta el caballo de que es la primera vez que montas. Esto es lo decisivo (...).

»Al día siguiente, por la mañana, muy temprano, estaban en la puerta, esperando al oficial recién incorporado, un soldado con su caballo y con otra cabalgadura para llevar la maleta, El alférez montó en el caballo y, por lo visto, el caballo se dio cuenta en el acto de que era la primera vez que montaba, porque, sin más, se lanzó a una especie de pequeño trote, con cara de alarma del alférez. El caballo se paró cuando quiso, y se puso a comer en uno de los lados de la carretera... por más que el alférez tiraba de las riendas inútilmente. Cuando el caballo lo creyó oportuno, se puso de nuevo a caminar por la carretera y, de cuando en cuando, se paraba; luego daba un trotecito, mientras el jinete miraba a los lados, con cara de susto. En esta situación venían en dirección contraria un equipo de Ingenieros que estaba enrollando un cable, para un tendido de luz. Y entonces los del cable le preguntaron:—¿Tú, a dónde vas? Y dijo el jinete con gran verdad y con una filosofía verdaderamente realista:

»—¿Yo? Yo iba a Jaurrieta; lo que no sé es dónde va este caballo... (...).

»Quizá también si a nosotros se nos preguntase de sopetón: “¿Tú a dónde vas?”, podríamos decir: “Yo, yo iba al amor, yo iba a la verdad, yo iba a la alegría; pero no sé dónde me está llevando la vida”».

¡Qué estupendo sería –si alguien nos preguntara, «¿tú a dónde vas?»– poder decir: Yo voy a Dios, con el trabajo, con las dificultades de la vida, con la enfermedad quizá!... ¡este es el objetivo, donde han de llevarnos los bienes de la tierra, la profesión.... ¡todo! ¡Qué pena si hubiéramos constituido en un bien absoluto, lo que solo debe ser un medio! Examinemos hoy al terminar nuestra oración si la profesión es un medio para encontrar a Dios, si los bienes, cualesquiera que sean, nos ayudan a ser mejores...

Jesucristo nos enseña continuamente que el objeto de la esperanza cristiana no son los bienes terrenos, que la herrumbre y la polilla corroen y los ladrones desentierran y roban Mt 6, 19., sino los tesoros de la herencia incorruptible. Cristo mismo es nuestra única esperanza. Nada más puede llenar nuestro corazón. Y junto a Él, encontraremos todos los bienes prometidos, que no tienen fin. Los mismos medios materiales pueden ser objeto de la virtud de la esperanza en la medida en que sirvan para alcanzar el fin humano y el fin sobrenatural del hombre. Solo son eso: medios. No los convirtamos en fines.

San Pablo de la Cruz Fundador
Año 1775


San Pablo de la Cruz es el fundador de los Padres Pasionistas, nació en Génova (Italia) en 1684.

Cuando era niño, cada vez que le llegaba algún sufrimiento especial, la mamá le mostraba un crucifijo y le recordaba que Jesús ofreció sus sufrimientos por nosotros, y que también nosotros debemos ofrecer por Él lo que sufrimos. Así lo fue entusiasmando por la Pasión de Cristo.

Su padre le leía de vez en cuando el libro de vidas de Santos, y esto lo animaba mucho a ser mejor. Aquel buen hombre avisaba también continuamente a su hijo acerca de lo peligroso y dañino que es juntarse con malas compañías. Así lo libró de muchos males y peligros.

A los 15 años oyó un emocionante sermón acerca de esta frase de Jesús: "Si no se convierten y no hacen penitencia, todos perecerán". En esa fecha hizo una confesión general de toda su vida y desde aquel día empezó a dormir en el duro suelo, a ayunar, a dedicar varias horas de la noche a rezar y a leer libros piadosos. Luego organizó con algunos de sus compañeros una asociación de jóvenes para ayudar a los demás con sus palabras y buenos ejemplos a ser mejores. Varios de esos muchachos se hicieron religiosos después.

Se alistó en el ejército del Sumo Pontífice para defender la religión, pero después de un año se dio cuenta que no tenía vocación para militar. Luego rechazó unos negocios muy prometedores que le ofrecían y un matrimonio muy brillante que se le presentaba. Se quedó por varios años en la casa de sus padres dedicado a la oración, a la meditación y a practicar la caridad hacia los pobres.

En 1720 vio que en sueños le mostraban una sotana negra con un corazón y una cruz blanca y el nombre de Jesús. Era como un aviso del hábito o distintivo que debería dar a sus religiosos. Después en una visión oyó a la Sma. Virgen que le aconsejaba fundar una comunidad que se dedicara a amar y hacer amar la Santísima Pasión de Jesucristo. Pablo presentó estos mensajes por escrito al Sr. Obispo y a su director espiritual. Ambos, conociendo la vida heroica de virtud y oración que el joven había llevado desde niño, reconocieron que se trataba realmente de una vocación señalada por Dios. Y el Sr. Obispo le dio a Pablo la sotana negra con el corazón blanco y la cruz sobre el pecho.

Pablo se retiró durante 40 días a redactar los Reglamentos de la nueva comunidad, en una húmeda habitación junto a una sacristía, donde vivió todo ese tiempo a pan y agua y durmiendo por la noche en un lecho de paja. Esos Reglamentos son los que han seguido siempre sus religiosos. Luego se dedicó a ayudar a los sacerdotes a dar clases de catecismo, y a predicar misiones populares con gran éxito.

Los primeros candidatos que se presentaron pidiendo ser admitidos en la nueva Congregación, encontraron demasiado duro el Reglamento y se retiraron. Mientras tanto San Pablo de la Cruz y un compañero suyo viajaban por los pueblos predicando misiones y obteniendo muchas conversiones.

San Pablo de la CruzEl Papa Benedicto XIV aprobó los Reglamento, pero suavizándolos un poco, y entonces empezaron a llegar novicios, y pronto tuvo ya tres casas de religiosos pasionistas.

En todas las ciudades y pueblos a donde llegaba predicaba acerca de la Pasión y Muerte de Jesucristo. A veces se presentaba con una corona de espinas en la cabeza. Siempre llevaba en la mano una cruz, y con los brazos extendidos, el santo hablaba de los sufrimientos de Nuestro Señor, en forma que conmovía aun a los más duros e indiferentes. A veces, cuando el público no demostraba conversión, se azotaba violentamente delante de todos, por los pecados del pueblo, de modo que hacía llorar hasta a los soldados y a los bandoleros.

Un oficial que asistió a algunos de sus sermones decía: "Yo he estado en muchas batallas, sin sentir el mínimo miedo al oír el estallido de los cañones. Pero cuando este padre predica me hace temblar de pies a cabeza". Es que Dios le había dado la eficacia de la palabra y el Espíritu Santo le concedía la gracia de conmover los corazones.

En los sermones era duro e intransigente para no dejar que los pecadores vivieran en paz con sus vicios y pecados, pero luego en la confesión era compresivo y amable, invitándolos a hacer buenos propósitos, animándolos a cambiar de vida, y aconsejándoles medios prácticos para perseverar siendo buenos cristianos, y portándose bien.

Dios colmó a San Pablo de la Cruz con dones extraordinarios. A muchas personas les anunció cosas que les iban a suceder en el futuro. Curó a innumerables enfermos. Estando a grandes distancias, de pronto se aparecía a alguno para darle algún aviso de importancia, y desaparecía inmediatamente. Rechazaba toda muestra de veneración que quisieran darle, pero las gentes se apretujaban junto a él y hasta le quitaban pedacitos de su sotana para llevarlos como reliquias y recuerdos.

Con su hermano Juan Bautista trabajaron siempre juntos predicando misiones, enseñando catecismo y atendiendo pobres. Como ambos eran sacerdotes, se confesaban el uno con el otro y se corregían en todo lo necesario. Solamente una vez tuvieron un pequeño disgusto y fue cuando un día Juan Bautista se atrevió a decirle a Pablo que lo consideraba un hombre verdaderamente virtuoso. El santo se disgustó y le prohibió hablarle por tres días. Al tercer día Juan Bautista le pidió perdón de rodillas y siguieron siendo buenos amigos como antes.

En 1771 fundó la comunidad de Hermanas Pasionistas que se dedican también a amar y hacer amar la Pasión y Muerte de Nuestro Señor Jesucristo.

En 1772 sintiéndose muy enfermo mandó pedir al Papa su bendición para morir en paz. Pero el Sumo Pontífice le respondió que la Iglesia necesitaba que viviera unos años más. Entonces se mejoró y vivió otros tres años.

Su muerte ocurrió el 18 de octubre de 1775 cuando tenía ochenta años. Antes de cien años (1867) fue declarado santo.