Porque Dios no envió a su Hijo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por El.
En eso consiste el juicio: la luz vino al mundo, y los hombres prefirieron las tinieblas a la luz, porque sus obras eran malas.
Todo el que obra mal odia a la luz y no se acerca a ella, por temor de sus obras sean descubiertas.
En cambio, el que obra conforme a la verdad se acerca a la luz, para que se ponga de manifiesto que sus obras han sido hechas en Dios.
Propósito:Como Gratitud por la vida que Dios me dio, seré cuidadoso en el uso del tiempo, sin perderlo en tonterías.