miércoles, 4 de febrero de 2009

JMSMientras el mundo apuesta por el poder de las armas y del dinero, que es la ley del más fuerte, Jesús nos enseña que el reinará por el amor cuando nos hagamos niños guiados por Su Padre Celestial. Nos pide una profunda conversión de corazón:
Yo os aseguro: si no cambiáis y os hacéis como los niños, no entraréis en el Reino de los Cielos. Mateo 18,3
Vemos entonces que el objetivo primario de la devoción al Divino Niño ha de ser nuestra propia transformación para ser cada vez más como Jesús, en todo hijos dóciles y obedientes al Padre. Así propiciamos su Reino.
YO REINARE
El es el Camino, la Verdad y la Vida.
El y solo El renueva nuestros corazones para que seamos también nosotros hijos del Padre. Esta devoción se hace en la misma fe que nos mueve a rezar en el Padre Nuestro: "Venga Tu Reino".

Argentina: campaña para que no saquen del cable la señal “María esperanza del mundo”: escribir a santamaria@telered.com.ar
(el email fallaba porque habíamos dejado espacios antes y después del arroba para que no lo levantaran los spiders que juntan emails para spam pero algunos no se dieron cuenta que lo hicimos a propósito).